Ir al contenido principal

Perfección.

Los seres humanos estamos obsecionados con ser perfectos, sobre todo los débiles.
Así es, fingimos estar bien, fingimos sentir que todo está perfecto, con una sonrisa escuchamos, comprendemos y aconsejamos
Muchas veces, por ingenuidad, nos dejamos pisotear, dejamos que nos dejen atrás, dejamos que el prójimo se nos coloque delante
Y como somos "perfectos" decimos que todo está bien, nada nos enfada, nada nos saca de lugar.

Los perfectos nos envolvemos en conformismo, así podemos ocultar la ambición, y entonces así sonreímos y fingimos que todo está... Perfecto.
Estamos siempre con una sonrisa, luego del tiempo esa sonrisa es desgastada y algo presionada
Es algo obsesiva de hecho. Los perfectos, por dentro, estamos llenos de locura.
Ganas de mandar todo al cuerno, pero sin poder, es tanta la obseción, que hasta nos hacemos creer que estamos bien en todo.
Pero no es así... Los perfectos somos una bomba de tiempo. Ni nosotros mismos sabemos cuándo vamos a explotar

Lo más gracioso de todo, es que justo cuando dejamos de ser perfectos, es que sentimos que la vida nos sonríe.
Quién sabe por qué. Quizás porque liberamos presión, porque ya no hay que fingir...
Si queremos gritar, gritamos. Al fin podemos decir NO sin sentir que es de mala educación.
Nuestra mente entonces no funciona, y buscamos sólo lo que nos haga sonreir... Y hablo de sonreir realmente, ya que hemos fingido esa mueca muchas veces.
Pero bueno, que rollo con los perfectos ¿No?

Entonces, por ahora eres perfecto. Veamos cuándo haces ¡BOOOMMM!, sólo es cuestión de tiempo... Tiempo, recuerda...
Ningún tiempo es perfecto, sólo es un buen momento.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Play.

¿A qué juegas? Pajaros vuelan por mi ventana y sólo conjuran mi muerte. ¿Los pueden oír cantar? Me estoy envenenando entre cada carcajada, y mis lágrimas se acumulan en la comisura medial. No puedo ver. ¿Me guías? ¿A qué juegas? Vida... ¿A qué juegas? Tómame por la cintura y bailemos a la melodía del infierno... lento, despacio. Navega mi piel y limpia todos mis pecados. ¿Podrías tomar mi mano y tallar mi muñeca con tu sangre? Puedes quemarme. Ahora, ¿Sabes a qué juego? ¿Me conoces? Juguemos a que cada quien jugará algo distinto, pero al mismo tiempo. Muérdeme, y te quemo. Tállame y te acaricio. Limpia mi piel, pero no me salves. Yo limpiaré tus venas, pero contaminaré tu alma. Es una advertencia. Me gusta hacerles saber a mis víctimas lo que se les viene; sobre todo porque jamás me creen, hasta que lo sienten. ¿A qué juegas? Navega mi piel y limpia todos mis pecados. Puedes quemarme. Yo limpiaré tus venas, pero contaminaré tu alma.

"Lo que pasa con el alma es que no se ve"

 Tengo un sueño/pesadilla bastante recurrente... Él está allí, sé que está allí, compartiendo con toda mi familia. Yo, casi al llegar, casi sin pensarlo, comienzo a gritar: "¿Qué hace él aquí? ¡¿Qué demonios hace él aquí?! ¡SON TODOS COMPLICES! ¡QUE SE VAYA, QUIERO QUE SE VAYA! ¡QUE SE VAYA, MALDITA SEA, QUÉ LES PASA?!" Luego de la escena, todos se me quedan mirando y yo quedo totalmente avergonzada... "He hecho un escándalo"  Pienso en el sueño "Quizás no era para tanto..."  Entonces se me acerca, él, con cuidado, como si yo fuese una niña que hizo un berrinche, me sonríe.  Entonces vuelve todo este odio hacia mí, todo mi cuerpo está disgustado con su presencia le intento hacer daño, o eso ocurre en mi mente, pero la verdad es que no me puedo mover... Está muy cerca de mí y yo tengo mil cosas en mi mano: Una botella partida, un revolver, un cuchillo, un tenedor, un martillo. En una ocasión incluso un hacha... todo esto en mi mente. Y le he intentado dar u...

where's the mirror

 Deja de mirar hacia dentro si te hace arder, cariño, apenas te puedo tocar. Tu piel de tanto ponerse de gallina cada vez que traes un recuerdo se te ha vuelto lija. Tus poritos no saben respirar otra cosa que no sea nostalgia y... Ya debes parar.  Sé todo lo que deseas gritar pero no es el momento...  ¡Hasta cuándo! Estoy tan cansada de tragarme cada puto grito que ya mis entrañas, las pobres, ¡están a reventar de pena! Tengo gritos en vez de venas, tengo una bola gigante dentro de cada pulmón, y va creciendo cada vez más, cada día. Estoy dentro eternamente, es lo que no ves. ¡Necesito volver! No sé a dónde pero necesito volver. En mis ojos hay un abismo que me traga cada que me miro al espejo... Me dice que me rompa, necesita romperse, romperme, necesito... liberarme. No tienes idea.