Desde lo alto del cielo, y desde lo alto de ti... ¿Qué cae más lento, una gota de lluvia, o tu lamento?
No contestes, te tengo miedo.
Criatura anónima, te vistes tal cual te conviene y nadie te ve, y nadie te siente. Hasta que, claro, confían en ti, y entonces, hundes lo que no te gusta.
Por eso me piensas hundir ¿Cierto?
Es que ya te siento, es que ya te escucho, yo sí te escucho, yo sí.... Yo te adivino.
Te escuchas vacilante, ¿Es que acaso me temes porque ya sé que eres tú? Ten calma, ven a destruirme, aún no sé tu nombre.
Mi soledad se basa en perder tiempo importante, sólo para... Decir que he vivido.
¿Se entiende? No ¿Verdad?
La cuestión está en prendernos fuego para sentir. ¿Ahora sí? Bueno, y sigo...
Mi bestia no ha sido liberada, o no por completo.
Digamos que es tan inmensa que sale por partes, y no a juntarse precisamente. Mientras una parte está fuera, otras a dentro, y así. Jamás varias juntas, jamás dejaría que eso sucediese. Pobre de quienes estén a mi alrededor, pobre de mi, pobre de... Pobre de la bestia cuando se de cuenta lo que significa. Se temerá a ella misma, y se destruiría, estoy segura que lo haría. Es demasiado bondadosa, destructiva y egoísta para hacerlo físico. Físicamente desaparecer, me refiero.
Y entonces, solitaria bestia, ¿Vas a pasear luego en alma, sin vergüenza alguna? ¿Sin rostro? ¿Sin cuerpo merodeando por allí? Quiero saberlo desde ya, al menos sabría lo que me puedo divertir en vida.
O en muerte. ¿Podría?
No te hagas la que no, porque... Sabes que eres descaro puro.
¿Soy descaro? Es decir, yo soy tu rostro, así que, me tienes donde quieras. Y yo juego a que no es mi culpa, pero lo es.
Tengo sed de amar. Bestia, ¿Me permitirías un poco de... Olvídalo, así estoy bien. Demasiada depresión tengo acumulada como para lo que queda y lo que sobra. Y lo que soy y lo que seré y lo que fui que jamás me percaté. Y a la mierda todo.
Así es como me hundirás, ¿eh, bestia? De a poco, con tus voces dándole cuerda a mi desesperación por no vivir o vivir demás, ¿Eh? Una miseria es lo que me espera.
En mi mente, mientras muera, sólo sonará Lent et grave de Satie.
Y entonces te recordaré tal cual fuiste. Demasiada inocencia para ti sola, y demasiada crueldad para como te fuiste.
Desde lo alto del cielo, y desde lo alto de ti... ¿Qué cae más lento, una gota de lluvia, o tu lamento?
No contestes, pero no, ya no te tengo miedo.
No contestes, te tengo miedo.
Criatura anónima, te vistes tal cual te conviene y nadie te ve, y nadie te siente. Hasta que, claro, confían en ti, y entonces, hundes lo que no te gusta.
Por eso me piensas hundir ¿Cierto?
Es que ya te siento, es que ya te escucho, yo sí te escucho, yo sí.... Yo te adivino.
Te escuchas vacilante, ¿Es que acaso me temes porque ya sé que eres tú? Ten calma, ven a destruirme, aún no sé tu nombre.
Mi soledad se basa en perder tiempo importante, sólo para... Decir que he vivido.
¿Se entiende? No ¿Verdad?
La cuestión está en prendernos fuego para sentir. ¿Ahora sí? Bueno, y sigo...
Mi bestia no ha sido liberada, o no por completo.
Digamos que es tan inmensa que sale por partes, y no a juntarse precisamente. Mientras una parte está fuera, otras a dentro, y así. Jamás varias juntas, jamás dejaría que eso sucediese. Pobre de quienes estén a mi alrededor, pobre de mi, pobre de... Pobre de la bestia cuando se de cuenta lo que significa. Se temerá a ella misma, y se destruiría, estoy segura que lo haría. Es demasiado bondadosa, destructiva y egoísta para hacerlo físico. Físicamente desaparecer, me refiero.
Y entonces, solitaria bestia, ¿Vas a pasear luego en alma, sin vergüenza alguna? ¿Sin rostro? ¿Sin cuerpo merodeando por allí? Quiero saberlo desde ya, al menos sabría lo que me puedo divertir en vida.
O en muerte. ¿Podría?
No te hagas la que no, porque... Sabes que eres descaro puro.
¿Soy descaro? Es decir, yo soy tu rostro, así que, me tienes donde quieras. Y yo juego a que no es mi culpa, pero lo es.
Tengo sed de amar. Bestia, ¿Me permitirías un poco de... Olvídalo, así estoy bien. Demasiada depresión tengo acumulada como para lo que queda y lo que sobra. Y lo que soy y lo que seré y lo que fui que jamás me percaté. Y a la mierda todo.
Así es como me hundirás, ¿eh, bestia? De a poco, con tus voces dándole cuerda a mi desesperación por no vivir o vivir demás, ¿Eh? Una miseria es lo que me espera.
En mi mente, mientras muera, sólo sonará Lent et grave de Satie.
Y entonces te recordaré tal cual fuiste. Demasiada inocencia para ti sola, y demasiada crueldad para como te fuiste.
Desde lo alto del cielo, y desde lo alto de ti... ¿Qué cae más lento, una gota de lluvia, o tu lamento?
No contestes, pero no, ya no te tengo miedo.
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