Ir al contenido principal

La gran frase.

Hay quienes planean por meses decir esas dos palabras.

Hay quienes preparan el gran momento acompañado de rosas, y un gran anillo.
O quienes simplemente planean decir el discurso pre al abismo.
También están quienes temen decirlo, y muerden el sentimiento luchando para que
nadie lo sepa, pero es inevitable, los ojos hablan, y al pestañear sueltan letra por letra...
Callan, callan, hasta que lo dicen, incluso sin darse cuenta. Como si fuese habitual.

Pasa mucho...

Y estamos éstas personas...

Quienes no quieren asimilar el sentimiento.
Quienes decimos que es una exageración.
Quienes nos alejamos de la verdad, porque toda verdad duele.

Y es que, ¿Qué acaso no es mejor fingir?
Hasta que no se admita no es real. ¿No es acaso de esa manera?

Porque, luego que todo lo dices, mi estimado amigo, estás jodido.
No hay vuelta atrás.
No hay un "sin culpa", "me equivoqué"
Es que todo está jodido. Pues...
Tengo ésta creencia de, que esa frase, esa maldita frase, es el inicio de un cataclismo;
definitivamente considero que esa frase es para colocarla en el final de un cuento, una novela, o una película. Porque...
¿Qué viene luego de eso?
Nada...
Nada más que destrucción, vacío. Es la nada.
Es la nada atrapada en dos palabras.
____________________________________________________________________________________

Lo siento, sin embargo...
¿En qué capítulo vamos, querido?
No llevo la cuenta, pero, aunque siempre los "te amo" significan aquel final feliz, no lo dije con esa intención...

Lo siento, lo siento, pero es que, tenía que decirlo para poder inhalar oxígeno puro.
Definitivamente descargar tanto sentimiento con el cigarro ha hecho efecto, ya el oxígeno me sabe diferente.
Lo siento...

Lo dije, sin embargo, no es de manera habitual, no confundas.
Pues no es lo que quería decir, sino lo que necesitaba decir...
Lo que mi pecho quería vaciar para quedar muy dentro de tu cabeza.
Quería que lo supieras sólo para que tengas uso de razón, una referencia de lo mucho me afectas
de lo mucho que dueles
que realmente me dueles...
Que no estoy contigo sólo por afan a no estar sola, sino por esa ansiedad inquebrantable que me invade al estar tan lejos de ti.

Es un fastidio, vaya, vaya que lo es...
Sólo espero dejar de sentir,
¿Sabes? Porque, al negarme al sentimiento simplemente hacía que se me hinchase el pecho al oprimirlo contra mis costillas sin dejarlo salir.
Porque al negarlo, no había nada que admitir, lo que conllevaba a una infelicidad por selectividad. ¡Y no! Todo va mucho más allá.

Al decirlo... Todo se escapa.
Todo aquello que me hacía desfallecer a eso de las 4am al despertar, a las 6am al ir en camino a algún lado, a las 9am al desayunar, a las 12pm al almorzar, a las 3pm al leer tal o cual libro, a las 5pm al ver a cualquier persona con ganas de seguir adelante, a las 7pm al ver las palomas volar cuando se oculta el sol, a las 9pm antes de dormir... Todo aquel sentimiento oprimido que me hacía desfallecer por los intentos de fuga al intentar hacerme gritar, llorar, incluso hacer cualquier gesto que me delatara; todo aquello simplemente ya no está. Pues todo está dicho.

El desfallecimiento ocurrió al decirlo. Pues, ahora ¿Cuál era mi excusa de estar tan mal?
Bien, pues insisto, todo va mucho, mucho más allá.

Pues, le dije, lo siento, siento lo que dije, y me ahogo en la tempestad de los sucesos.
"Te..."
Claro que sí, pero, los sucesos, querido. Ese es el dolor, ese es y será por siempre mi dolor.
y es que ¿De qué me sirve escucharlo si no lo creo, o no lo quiero cree, porque ya nada lo creo?
Y ¿De qué me sirve no decirlo, pero sentirlo, y además, creer que es exagerado?  No, pero, peor aún..
¿De qué me sirve decirlo, sentirlo, sabiendo que todo es un exageración, si todo esta jodido?

Somos dos amantes, que sienten con locura, pero, que por consecuencia de actos fallidos, el sentimiento no les basta.
No me basta.
Es el amor más poderoso,  y por ende, el más doloroso que me ha tocado experimentar.

Tengo que resaltar a éste punto, que, definitivamente "la gran frase" no es lo que quería decir, sino lo que necesitaba decir...
Lo que mi pecho quería vaciar para quedar muy dentro de tu cabeza.
Quería que lo supieras sólo para que tengas un uso de razón, una referencia de lo que me afectas
lo que me dueles
que realmente me dueles...
Que no estoy contigo sólo por afan a no estar sola, sino por esa ansiedad inquebrantable que me invade al estar tan lejos de ti.
Al decirlo... Todo se escapa.
Todo aquello que me hacía desfallecer a eso de las 4am al despertar, a las 6am al ir en camino a algún lado, a las 9am al desayunar, a las 12pm al almorzar, a las 3pm al leer tal o cual libro, a las 5pm al ver a cualquier persona con ganas de seguir adelante, a las 7pm al ver las palomas volar cuando se oculta el sol, a las 9pm antes de dormir... Todo aquel sentimiento oprimido que me hacía desfallecer por los intentos de fuga al intentar hacerme gritar, llorar, incluso hacer cualquier gesto que me delatara; todo aquello simplemente ya no está. Pues todo está dicho.
Espero que escapes junto a cada palabra que lograron pronunciar mis labios.
Espero respirar mejor. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Play.

¿A qué juegas? Pajaros vuelan por mi ventana y sólo conjuran mi muerte. ¿Los pueden oír cantar? Me estoy envenenando entre cada carcajada, y mis lágrimas se acumulan en la comisura medial. No puedo ver. ¿Me guías? ¿A qué juegas? Vida... ¿A qué juegas? Tómame por la cintura y bailemos a la melodía del infierno... lento, despacio. Navega mi piel y limpia todos mis pecados. ¿Podrías tomar mi mano y tallar mi muñeca con tu sangre? Puedes quemarme. Ahora, ¿Sabes a qué juego? ¿Me conoces? Juguemos a que cada quien jugará algo distinto, pero al mismo tiempo. Muérdeme, y te quemo. Tállame y te acaricio. Limpia mi piel, pero no me salves. Yo limpiaré tus venas, pero contaminaré tu alma. Es una advertencia. Me gusta hacerles saber a mis víctimas lo que se les viene; sobre todo porque jamás me creen, hasta que lo sienten. ¿A qué juegas? Navega mi piel y limpia todos mis pecados. Puedes quemarme. Yo limpiaré tus venas, pero contaminaré tu alma.

Compañía.

Ya que sólo nos hacemos compañía con un cigarrillo en mano, hablemos de nicotina Acepto intercambio de sabores sólo bésame la boca y explícame los tipos y dime cuál es mejor y a mitad de aquel largo beso, inhala nicotina y exhala deseo en mi y puedes mirarme a los ojos cuando te alejes y puedes simplemente tirar el cigarrillo, y tomarme de la mano. Entonces podríamos hacernos compañía sin el cigarrillo en mano y entonces podríamos estar juntos algún día y compartir un café.

Mi hogar.

El mundo está loco, pero, ¿Y eso qué importa? Estás conmigo. Y es que no es el mundo lo que importa, y es que, no es el que te ame lo que importa, no es el que me ames lo que importa. El mundo está loco, pero, ¿Y eso qué importa? Estás conmigo. Es una sola idea, y es la de rasgar al planeta. Vamos, vamos, volemos, desgarremos al universo y dejemos de ser parte del cosmos. Hagamos colisionar todas las galaxias, y así, que se consuman, y que se expandan, y que de pronto, nos perdamos. Nos perdemos porque ahora todo es más, y es demasiado. Pero, qué importa, estoy contigo. ¿Crees que es para tenerte todo ésto? Para nada, me entrego a ti, como todo lo que somos. Ven, colisionemos, y seamos más. Somos nosotros, y nada basta. Somos suficiente con nosotros, pero, por fuera, nada basta, porque el mundo está loco, y nosotros simplemente enloquecemos. No te conozco, y no me conoces, pero, aún así, puedo entregarte una taza vacía, y sabes que está llena. Y puedes darme un cubo, y sé qu...